Debido a los múltiples bloqueos, el Centro de Operaciones y Resiliencia de Río (COR) elevó el nivel operacional de la ciudad al nivel 2, de una escala de 5. La Policía Militar ordenó el despliegue de todo el personal en las calles y las actividades administrativas quedaron suspendidas.
La operación policial y militar movilizó helicópteros, drones, vehículos blindados, unidades de demolición y ambulancias, al tiempo que en la acción participaron agentes de la Coordinadora de Recursos Especiales, delegaciones especializadas, la Policía Militar y el Comando de Operaciones Especiales.