Esta tarea es el resultado final del decomiso de las armas de fuego de los juzgados penales de toda la provincia que son recibidas por la Oficina de Elementos Secuestrados y que llegan a su destino final para su posterior destrucción respetando la Ley Nacional de Armas N°25938 que dispone que las armas sean enviadas al ANMAC.
La doctora María Victoria López, encargada del Depósito de Elementos Secuestrados del Poder Judicial, destacó la intervención cumplimentada por los agentes judiciales y comentó que "el personal del Poder Judicial de la provincia fue felicitado por el organismo nacional ya que por la forma en la que prepararon las armas se logró un mejor y más ágil control de las mismas".
Corrientes es tomada como ejemplo por la manera de clasificar y ordenar las armas para su control y por ello integrantes del Depósito de Elementos Secuestrados serán invitados a participar de la reunión entre los poderes judiciales de todo el país y los miembros de todas las fuerzas de seguridad.