La semana pasada el peronismo propuso sumar tres proyectos de rechazo a la desregulación de la Marina Mercante, al DNU que busca disolver el Instituto del Teatro y la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP), y al DNU que transforma el Banco Nacional de Datos Genéticos en un organismo desconcentrado dependiente de la Jefatura de Gabinete. Pero Democracia para Siempre no aceptó incluirlos en su sesión.
Como resultado, Unión por la Patria y Encuentro Federal convocaron a otra sesión especial para el mismo día pero dos horas después. Además de los tres proyectos de rechazo ya mencionados también se incluyó una modificación sobre actualización de montos por el delito de evasión tributaria (Ley 24.769 de Régimen Penal Tributario). Según explicaron a Infobae, se trata más bien de un gesto simbólico: “Si hay quórum para la primera sesión, esta se va a extender tanto que no se va a poder realizar la segunda sesión. Y si la primera se cae por falta de quórum, no hay chances de que se llegue al quórum con la segunda”, sintetizaron.
Sin embargo, Democracia para Siempre, el bloque referenciado en Facundo Manes y Martín Lousteau, sí aceptó sumar al temario de la primera sesión todos los proyectos relacionados con la baja de las retenciones al campo. En total son siete. Fue un pedido de los diputados de Córdoba que responden al gobernador Martín Llaryora.
Ayer por la tarde casi todas las bancadas opositoras coincidieron en que la suerte de ambas sesiones se iba a definir en la reunión entre los representantes del Ministerio de Economía y los gobernadores. El Poder Ejecutivo se había comprometido a presentar otra contraoferta a los reclamos por la caída de los ingresos que registran las provincias, pero no lo hizo.
Los gobernadores se habían reunido la semana pasada en el Consejo Federal de Inversiones (CFI) para empezar a diseñar un proyecto de ley en el Senado para repartir, con un coeficiente coparticipable, el stock de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), y para establecer una nueva forma de distribución Impuesto a los Combustibles Líquidos. Y tienen decidido avanzar en el Senado donde su aprobación estaría garantizada.
Los bloques de Democracia para Siempre, Unión por la Patria, la Coalición Cívica, Encuentro Federal, Innovación Federal y el Frente de Izquierda en Diputados podrían llegar al quórum si todos sus integrantes bajaran al recinto. Pero como viene ocurriendo desde el año pasado, la injerencia directa de los gobernadores puede causar ausencias clave en la mayoría de las bancadas, poniendo en riesgo la sesión.
“Universidades y Garrahan son temas que no afectan recursos provinciales, es difícil que quieran jugar este partido, por más que ya hubo algunos cambios en la relación con el Gobierno”, adelantaron cerca de uno de los gobernadores cercanos al oficialismo.
De todas formas, la amenaza para la Casa Rosada no es inminente y los mandatarios provinciales tienen margen para hacer su juego ya que los principales proyectos, como el de financiamiento universitario, la declaración de emergencia en pediatría (Garrahan) y la reforma del régimen de DNU no tienen dictamen de comisión. Esto quiere decir que para ser aprobados “sobre tablas” necesitarían una mayoría especial de dos tercios de los votos que la oposición no tiene.
Lo que sí puede hacer la oposición es aprobar por mayoría simple diferentes emplazamientos, que son un mecanismo para obligar a los libertarios a abrir algunas comisiones clave, por ejemplo la comisión de Presupuesto que preside José Luis Espert. Por ejemplo, el financiamiento universitario y la emergencia en pediatría están frenadas en comisión porque Espert no habilita su tratamiento en Presupuesto.
Estos dos temas reúnen un amplio consenso en todo el arco opositor y en caso de llegar al quórum casi con seguridad lograrían un emplazamiento. En cambio, la reforma del Régimen Legal de los DNU podría enfrentar mayores problemas.
Este proyecto establece plazos para que el Congreso trate los decretos (90 días), la caída definitiva con el rechazo de una sola Cámara y la posibilidad de aprobar artículos por separado sin tener que dejar vigente la totalidad del DNU. Es muy resistido por la Casa Rosada.
El último factor que incidirá en las sesiones de mañana serán las ausencias por causas no relacionadas con la presión de los gobernadores, como enfermedades o diputados que simplemente deciden no viajar para seguir haciendo trabajo territorial. Dado que no se logró conformar un amplio acuerdo entre todos los espacios opositores, algunos diputados ya reconocen que posiblemente algunos bloques “jueguen a media máquina” sin hacer demasiados esfuerzos por asegurar una presencia completa.
La primera sesión está prevista para las 12, pero antes, en la reunión de Labor Parlamentario, ya quedará en claro si el Gobierno puede respirar aliviado.