Latam Airlines utilizó la quinta libertad del aire, que significa el derecho que tiene una empresa de esta clase a trasladar pasajeros entre dos países, con su propio país como uno de los puntos de conexión. Además, se aplicó también la política de cielos abiertos.
La aerolínea también busca sumar a Argentina al acuerdo de Joint Venture (JV), un tratado comercial de cooperación con Delta Airlines. Esta unión facilitó el acceso a 300 destinos, según apunta el sitio especializado Aviación Online.
En paralelo, el Gobierno también autorizó a la aerolínea lowcost Arajet, de República Dominicana, para que pueda realizar vuelos desde Mendoza, Rosario y Córdoba, con destino a Punta Cana. Se espera que, para fin de año, se dupliquen las conexiones aéreas entre ambos países.